a feroz disputa por ser el candidato de Juntos por el Cambio en la Ciudad de Buenos Aires tuvo un alto de fuego. Y allí aprovecharon ambos candidatos para buscar puntos de acuerdo: “Tenemos que tener un solo búnker”, lanzó Martín Lousteau y desde ambos equipos de campaña empezaron a caminar la idea. Si prospera, el radical y Jorge Macri esperarían juntos los resultados del domingo 13 de agosto. Y se produciría la foto de unidad apenas las urnas se vuelquen para uno u otro lado. “Estamos esperando a que se organicen los presidenciables del PRO para avanzar nosotros”, aseguran. El sábado 5 hubo novedades. Finalmente Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich estarán juntos, lo que le allana el camino a los de Capital.
La carrera por convertirse en candidato de Juntos es clave: el que gane la interna será el favorito para suceder a Horacio Rodríguez Larreta.
Recta final.
“Nosotros no vamos a hablar más de Jorge Macri”, dicen cerca de Lousteau. La estrategia del radical hasta las PASO será concentrarse en el proyecto de Ciudad que el economista quiere para el futuro: “Ayer presentó la propuesta de educación, hoy en la Escuela de Policía presentamos la de seguridad”, decía al cierre de esta edición un integrante de la mesa chica del candidato de la UCR. Y completaba: “Así será hasta las elecciones con otros ejes: salud, vivienda y juventud”.
En el búnker de Macri creen que el cambio de rumbo se explica por lo sucedido en las elecciones de Santa Fe. “Por ahí Lousteau tomó nota de lo que le pasó a Carolina Losada con Maxi Pullaro”, dicen sobre el candidato que el radical apoyó y salió victorioso en esa provincia.
En Santa Fe, Losada atacó con fiereza a Pullaro, asociándolo al narcotráfico y hasta poniendo en duda si lo acompañaría luego de las primarias. El ex ministro de Seguridad insistió con que no hablaría mal de su rival de la interna y los votantes lo acompañaron: arrasó en las PASO acercándose al medio millón de votos (más de 160 mil sufragios de diferencia con la senadora).
“Evidentemente, esa posición tan bélica de Martín no le estaba rindiendo”, dicen en el rincón de Jorge Macri. Y agregan: “Nosotros no le pedimos nada”.
La interna de Juntos en CABA tuvo momentos álgidos. Cuando se puso en riesgo la candidatura de Jorge Macri por las impugnaciones presentadas a la Justicia, Lousteau argumentaba por lo bajo que había “incompatibilidades”. La renuncia de Franco Rinaldi, por sus videos xenófobos y homofóbocos, fue otro punto de quiebre: el radical presionó y el del PRO debió ceder. La temperatura fue en aumento.
Por la virulencia de la campaña, Macri decidió recurrir a la Justicia. Presentó una denuncia para que se investiguen “campañas negativas” en su contra: “Hay que entender de dónde viene, quién fue y si es plata blanca. Calculamos que gastaron entre 32 y 35 millones en esto”, dijo sin precisar de dónde sacaba semejante cuenta. No señaló directamente a Lousteau, pero la duda quedó flotando en el aire. La semana anterior, el apoderado del radicalismo se había presentado en los tribunales para que se investiguen los afiches que atacaban a su precandidato: “Siempre preocupan las campañas sucias”, indican ahora.
En cuanto a los números, el primo del ex presidente es el más confiado. Las encuestas que le llegan le dan tranquilidad: “Antes de que se bajara García Moritán teníamos una buena diferencia. Ahora eso debería haber crecido”, analizan.
En ambos rincones estudian, además, el “voto táctico” del peronismo: una idea que empezó a dar vueltas en Twitter y que podría cobrar cierta fuerza, aunque difícilmente cambiaría tendencias. Electores de Unión por la Patria insisten en redes sociales con apoyar a Lousteau en las PASO “para que pierda el macrismo”. El consultor político Juan Courel, ex asesor K, pidió calma: “Tranquilos. Salvo el 1 por ciento de tuiteros ultra pasados de rosca (me incluyo), ningún votante kirchnerista va a votar a Lousteau en la interna de Cambiemos prefiriéndolo ante Leandro Santoro. Ninguno”.
Apoyos.
La otra gran pregunta que surgió durante la campaña es por el acompañamiento de Larreta a ambos candidatos. Fue tal la presión del ala dura del PRO, que el alcalde porteño tuvo que decir explícitamente: “Voy a votar a Jorge Macri”. Le exigían una definición enfática por el candidato amarillo que tardó en llegar.
Lo que no cesó fueron las recorridas con ambos precandidatos para mostrar equilibrio. Eso, para Mauricio Macri, genera cierta confusión en el electorado: “Deberían preguntarle a él (por Larreta) por qué la gente sospecha. Hablamos mucho y él me dice que trabaja para el PRO”, dijo el ex presidente.
Las suspicacias no ceden.
Larreta suma apoyos
Horacio Rodríguez Larreta busca seguir armando un rompecabezas de apoyos para enfrentar las internas. En su equipo van pintando las provincias donde Juntos por el Cambio es vencedor con los candidatos por los que él se jugó: “Poggi en San Luis, Orrego en San Juan y Pullaro en Santa Fe”, recitan. Pero ahora, además, el alcalde porteño le suma dirigentes nacionales a su espacio. Con un acto compartido en Tandil, anunciaron el acompañamiento de Facundo Manes, el lunes 1. Y al otro día, a través de Twitter, la ex gobernadora María Eugenia Vidal anunció que va a votar por Larreta. El precandidato le agradeció públicamente el gesto, pero el ex presidente Macri la reprendió: “Siento que ella ha tomado sucesivas decisiones que desdibujaron su perfil”, dijo.