La habilitación de pagos con dólares mediante tarjetas de débito avanza entre normativas y preparativos técnicos. Aunque el sistema generó expectativas en el sector comercial, enfrenta desafíos de implementación y su impacto inicial sería moderado
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) se encuentra afinando detalles para implementar un sistema que permita realizar pagos en dólares con tarjetas de débito en el mercado doméstico. Esta iniciativa busca dinamizar la economía utilizando los 22.165 millones de dólares ingresados por el último blanqueo y fomentando una transición hacia un modelo bimonetario. La normativa se aprobará en los próximos días y comenzará a regir en febrero.
Normativas en desarrollo y detalles del esquema
El nuevo sistema no implicará operaciones cambiarias. Según fuentes del sector financiero, los pagos en dólares se realizarán directamente desde las cuentas en esa moneda, sin conversión a pesos. Los precios de los productos y servicios que puedan ser abonados en dólares deberán exhibirse en esa moneda. Esto evitará complicaciones derivadas del cepo cambiario y simplificará las transacciones.
La implementación incluye la modificación de normativas existentes, como la resolución de 2002 de la Secretaría de Comercio, que obliga a exhibir precios en pesos como principales y en dólares en caracteres menores. Con el cambio, los precios podrán mostrarse en ambas monedas en igualdad de condiciones.
Además, las tarjetas de débito que operen en dólares deberán estar asociadas a cuentas en esa divisa. Las cuentas CERA, creadas específicamente para el blanqueo, no estarán habilitadas para este tipo de pagos, lo que obligará a los usuarios a transferir fondos desde estas a cajas de ahorro en dólares convencionales.
Límites y desafíos técnicos del sistema
Los comercios tendrán la posibilidad de adherir al esquema de manera voluntaria, aunque esta condición limita la masividad inicial del sistema. Para recibir pagos en dólares, los comercios deben contar con cuentas habilitadas en esa moneda. Actualmente, estas cuentas están restringidas a personas físicas, por lo que las entidades bancarias trabajan en mecanismos para facilitar la apertura de cuentas en dólares para personas jurídicas.
Además, las operaciones en dólares podrían enfrentar aranceles más altos que las realizadas en pesos, como ocurre en otros países con sistemas similares. Este aspecto está siendo discutido entre empresas emisoras de tarjetas, bancos y el Banco Central.
El BCRA proyecta que la puesta en marcha del sistema a partir de febrero será progresiva. Tanto las empresas emisoras de tarjetas como los adquirentes (los que proveen las terminales POS) aseguraron estar listas para comenzar en cuanto se publique la normativa. Sin embargo, prefieren esperar hasta garantizar una adhesión significativa por parte de los comercios.
Mientras tanto, el Gobierno busca incentivar el uso de los 22.000 millones de dólares del blanqueo y de los aproximadamente 230.000 millones de dólares que se encuentran fuera del sistema bancario, con el objetivo de estimular el consumo y reactivar la economía.