martes, abril 30

“No se podrá interrumpir el tránsito”: la Ciudad de Buenos Aires lanzó advertencias para la marcha piquetera de mañana

El ministerio de Seguridad porteño dio detalles de cómo actuará de cara a la protesta de este miércoles. Una por una, cuáles son las normas que implementarán

De cara a la marcha piquetera convocada para este miércoles en la Ciudad de Buenos Aires, el ministerio de Seguridad porteño dio a conocer cuáles serán las medidas que implementarán a lo largo de la jornada para asegurar el orden público y la libre circulación del tránsito durante la protesta.

as normativas son de acatamiento obligatorio y fueron lanzadas a modo de advertencia, a horas del primer desafío callejero que enfrentará tanto el nuevo gobierno nacional de Javier Milei como la gestión de Jorge Macri en CABA.

En este sentido, desde la cartera porteña señalaron que actuarán con todas las herramientas constitucionales para hacer cumplir las normas y destacaron que, en caso de que los manifestantes las infrinjan, procederán a actuar documentando acciones, denunciándolas o haciéndolas cesar, según corresponda.

Son cuatro las nuevas disposiciones comunicadas:

• No se podrá interrumpir el tránsito vehicular

•No se podrá participar con el rostro cubierto de manera intimidatoria

• Tampoco estará permitido el uso de palos o elementos contundentes.

• No podrá haber niños en las marchas

Sobre este último punto, especifican: “Vamos a exigirle a las organizaciones sociales que no se movilicen con niños, ya que eso vulnera sus derechos como el de estar en su casa o en la escuela, jugando o estudiando”, reza el documento difundido durante la tarde de este martes.

Según informaron desde el Ministerio de CABA, el objetivo de esta serie de reglas -que sigue la línea del protocolo antipiquetes anunciado la semana pasada por la ministra de Seguridad de Nación, Patricia Bullrich- es fortalecer el orden en el espacio público durante cualquier movilización para que convivan, en armonía, quienes deseen circular libremente con aquellos que se manifiesten. “Dentro de la ley”, aclaran en el comunicado.

“Ambos derechos deben poder ejercerse de manera equilibrada y sin conflicto. Las fuerzas de seguridad de la Ciudad tienen como prioridad cuidar la libertad de todos los ciudadanos y asegurar el orden en la convivencia social”, concluyen en el escrito.

La Ciudad de Buenos Aires actuará frente a cualquier protesta o marcha basándose en sus propias reglas, las cuales comenzarán a regir a partir de esta semana. No obstante, trabajarán en coordinación con el Gobierno Nacional, que en los últimos días dio a conocer el protocolo que implementará para estos casos.

Cómo será el operativo de seguridad en la marcha de mañana

Esta mañana, la ministra Bullrich recibió en sus oficinas del Ministerio, en la calle Gelly y Obes 2289 del barrio de Recoleta, a secretarios de Seguridad del país, reunión de la que participaron también los jefes de la Gendarmería Nacional, la Policía Federal Argentina (PFA), la Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Prefectura Naval Argentina, que son las cuatro fuerzas federales a cargo de la funcionaria.

Para el operativo de mañana, las fuerzas de seguridad van a custodiar los accesos a la Ciudad de Buenos Aires, las inmediaciones a la Casa Rosada y el Congreso Nacional. Está previsto también que armen un dispositivo especial para frenar micros e identificar piqueteros en estaciones de trenes. Se trata de lugares con jurisdicción federal, por lo tanto, intervendrán las fuerzas federales. La Gendarmería dará soporte a la PFA en ese sentido. En tanto que la Policía de la Ciudad, a cargo de Diego Kravetz, actuará para disuadir y evitar que los manifestantes interrumpan el libre tránsito, o hagan bloqueos o daños en la vía pública.

Según explicó Bullrich en conferencia de prensa, las cuatro fuerzas federales estarán habilitadas por la nueva disposición para intervenir en caso de bloqueo de caminos, piquetes o protestas que obstaculicen, total o parcialmente, la circulación del resto de los ciudadanos. La orden del ministerio es que los agentes intervengan directamente, respaldados por las nuevas disposiciones, cada vez que algún ciudadano, por el motivo que sea, no permita que el resto circule.