Por estos días, los pasos de Luis Barrionuevo, el secretario general a nivel nacional del gremio que agrupa a trabajadores gastronómicos y hoteleros, la Uthgra, parecen estar asociados al Gobierno nacional por un objetivo: recuperar el control de la seccional Ciudad de Buenos Aires, en manos de su excuñado, Dante Camaño, quien resultó el ganador de las últimas elecciones.
El histórico dirigente sindical, a través de un hombre de su confianza, Humberto Ballhorst, desafió a Camaño en comicios en diciembre de 2021 y cayó derrotado. Sin embargo, recurrió a la Justicia denunciando presuntas irregularidades en las elecciones. Para lograr un fallo favorable a sus intereses, fuentes gremiales observan que el exsenador tejió un vínculo con Wado de Pedro, ministro del Interior, con ascendencia en la Cámara Nacional del Trabajo y en la jueza a cargo del expediente que le interesa a Barrionuevo, Gabriela Vázquez, miembro de Justicia Legítima, agrupación judicial kirchnerista, y exintegrante del Consejo de la Magistratura.
Añaden que el fallo “está cocinado”, a pedido del exsenador por Catamarca, quien pretende dejar sin efecto el resultado de las elecciones ganadas por su excuñado, y hasta decretó la intervención de la seccional CABA de manera impulsiva durante 2022.
“La difícil tarea que deberá encarar la magistrada será confirmar una sentencia de primera instancia, cuyas numerosas irregularidades procesales y evidente falta de sustancia jurídica llevaron a un contundente dictamen desfavorable por parte del procurador fiscal de la Cámara, quien destruyó el fallo dictado por la doctora Ana Alfie”, destacan quienes conocen los manejos judiciales en torno a la causa.
De hecho, remarcan que Alfie, también con militancia en Justicia Legítima y pasado en la Central de los Trabajadores Argentinos, de Hugo Yasky, actuó a pedir del cacique sindical, apartándose de lo solicitado por las partes en el litigio y “en escandalosa contradicción con los fundamentos previos que hicieron lugar a una medida cautelar”, aseguran.
El movimiento de Barrionuevo no es casual: sus críticos sostienen que pretende quedarse con los recursos de la seccional CABA, por su gran rendimiento financiero, en pos de sostener al sindicato, jaqueado por el déficit que muestra la obra social de los gastronómicos y hoteleros, hoy objeto de críticas y quejas constantes de los afiliados.
Por otro lado, existen cuestionamientos por parte de dirigentes al nombramiento de Sandra Barrionuevo, hija de Luis, en la lista nacional. Una persona sin participación gremial previa, con magras experiencias en el ámbito empresarial gastronómico y dueña de la firma Sano y Bueno, que abastece a las sedes de la obra social, el sindicato central y al sanatorio Güemes.